La Catálisis y la Fotocatálisis como tratamientos novedosos para la degradación de contaminantes

Resumen

La eliminación de los contaminantes del ambiente es una tarea ardua y difícil de llevar a cabo por la complejidad de los efluentes o lugares contaminados. Por ello se ha buscado la posibilidad de desarrollar nuevas metodologías capaces de eliminar los contaminantes hasta compuestos inocuos. En el caso de la Catálisis y de la Fotocatálisis son dos alternativas viables, amigables con el ambiente y sencillas. La aplicación de la Catálisis en este caso fue para la eliminación del azufre del diésel evitando así la contaminación por dióxidos de azufre que son la principal fuente para generar la lluvia ácida que provoca daños a la salud y a los edificios deteriorándolos rápidamente. En el caso de la Fotocatálisis se aplicó para la eliminación del arsénico del agua, donde a través del uso de un semiconductor como el óxido de zinc, ZnO, de tamaño nanométrico dopado con una carga de partículas de cobre logró oxidar el arsenito y llevarlo a arsenato en 180 minutos. Esta reacción se llevó a cabo a pH 6.0 con una relación de concentración de catalizador de 1 g/L. Se comprueba que las partículas de cobre que fueron soportadas en la superficie del ZnO fueron capaces de oxidar al arsenito hasta arsenato en menor tiempo en comparación con el ZnO prístino.